Dice la gente que sabe que los tiempos de crisis son los más productivos artística y filosóficamente, o al menos, los más reveladores sobre la naturaleza humana… Nos ha fastidiado, listillos, como que cuando las cosas se ponen negras, negrísimas, no queda otra que apretar el culo o te quedas sin silla donde sentarte… Y claro, en cuanto nos ponemos a currar, algo termina saliendo.
Para mí esta crisis manufacturada viene a coincidir con la segunda preñez (¿o será al revés?) y lo de apretar el culo me viene estupendísimamente para complementarlo con los famosos «apretamientos» del amigo Kegel (para quien no sepa lo que son, que se lo pregunte a su parienta, amigas preñadas o ya paridas y que comparta sabiduría con el mundo, que a falta de una buenas bolas chinas, el Kegel hace maravilllas).
En las situaciones críticas hay que tomar decisiones críticas. Y en mi caso, entre las alteraciones hormonales, la primera criatura en plena ebullición corderil, lo que supone poner en marcha una locura de proyecto y no morir en el intento de aprobar un master inventado por el mismísimo diablo in person, tengo que reconocer que he adoptado una serie de medidas extraordinarias destinadas a mantener una mínima cordura, la justa para que no me retiren la custodia de mis criaturas, y que son, entre otras que me reservo por ser probablemente ilegales, las siguientes:
– La primera y más decisiva, he dejado de preocuparme tanto por «tontadas». No sé si será la oxitocina que ya empieza a hacer efecto, que soy realmente una inconsciente, o una abandonada de la vida, pero sepan Uds que tengo una cortina cuyo dobladillo me está llamando a gritos desde hace quince días. Yo la oigo cuando paso cerca, ahí sibilina, que me llama: eh, tú, psi, psi, que soy tu cortina nueva del Ikea ¡y estoy arrastrando! Vale que no soy un lujo, pero mari, que empiezo a coger costra del roce con el suelo, ¿sabes? eh, ¿sabes? ehhhhhh!!!! Yo me sonrío indolente, como diciendo, sí, sí, tú llamamé, que hasta que me encuentres aún te queda… Si mi madre me viera me daría un sopapo de los históricos, pero mama, allá donde estés, mándame un par de manos extras y una espalda nueva para plegarme a cogerlo y yo te hago el dobladillo en un santiamén, que como diría mi criatura, yo saber, ¡sepo!
En el mismo cajón-desastre de vida marujil están las manchas-que-nunca-saldrán del baby o del chándal de la criatura.Y es que yo al principio frotaba. Y luego volvía a frotar. Y le echaba algo del bote rosa, y luego del verde, y luego del amarillo, y lo dejaba unas horas ahí en remojo, a ver si sucedía el milagro. Y a veces hasta salía un poco. Pero ya ni con esas… No sé de qué material radioactivo o/y extraterrestre estarán compuestas, pero hemos probado hasta a mandar una muestra al CERN a ver si esa gente que anda por allí con bata nos soluciona el enigma de las manchas de la guarde o ya de paso el origen del universo, que también podría ser.
Podría seguir con la limpieza de las persianas, o echar el Baldosinín en los azulejos del baño, o planchar las sábanas… Pero olvídense, me hacen falta ocho vidas más o reencarnarme en Urdangarín en sus buenos tiempos para que la menda se entretenga en esas menudencias…
– Después de la renuncia a ser super ama de mi casa y de renunciar a abrir mis armarios a las visitas, reconozco sin reparos y sin sentirme culpa alguna que mi vida intelectual/cultural/elevada y superpuesta ha sido secuestrada, sin rescate, ni fecha de liberación ni tan siquiera una nota en la nevera diciendo que se ha ido a por tabaco. Se ha ido, se ha esfumado igual que mi figura de odalisca embutida en estos pantalones premamá que ya han pasado por cuatro posaderas, incluidas las mías (viva el reciclaje).
Sí, mis neuronas han organizado un gabinete de crisis a lo Primavera Valenciana y están apostadas en la plaza del pueblo con pancartas mientras exigen entre algaradas algo novelado, una historieta, aunque sea cortita, un poco de ficción, algo de humor, o incluso una biografía… Más quisiera yo!!! Pero chicas, la vida es dura, y en mi cabeza no hay sitio para más porque peta. Así que os conformáis con la basurilla empresarial que os estoy inculcando y no os quejéis que al menos no os estoy torturando con manuales sobre el embarazo y sus consecuencias fisiológicas . Avisadas estáis. ¡Y ni una voz quiero!
Además, como trabajo en mi cocina, no me relaciono más que con mis compañeros de guardería, con lo que ya he asumido que mis temas de conversación son y serán en este orden: el colegio de los niños que hay que ir buscando antes de que nos den el público que no quiere nadie porque está lleno de outsiders (y al que tendré que ir a recoger a mi criatura con mi pijama, mi bata y mis pantuflas, que lo veo venir), la búsqueda de colegio de los niños y lo mal que se portan los niños mientras los padres les buscamos un colegio como dios manda.
Ah, y por supuesto, torturo a todo el que tengo ocasión con mis alocadas ideas empresariales. Con lo cual, siempre acabamos volviendo al tema inicial: el colegio de los niños…
– Y además, me planteo seriamente adoptar la sana costumbre de mis convencinos y salir en pijama al Ahorramás (y me falta solo un mes de embarazo para no caber en otra prenda que no sea esa y las mallas). Con mi pijama rosa, la bata bien anudada, mi moño-Winehouse, una criatura adosada a lo koala en un costado y el bombo donde debe estar, las pantuflas con pompones y los billetes de 500 euros escondidos en el sujetador de premamá. Virtualmente seguiré siendo un ente con algo de estilo, pero en el plano más palpable me dejaré llevar por la mezcla de etnias. Y que le den al mundo civilizado… total, si se va a ir a la mierda de todas formas, yo al menos iré cómoda con mis churumbeles por los caminos del señor…
Y bueno, podría seguir enumerando sandeces que hacen mi vida algo más llevadera pero mejor paro porque acabaría hablándoles del cole de mi criatura…
Y para qué queremos más.
Muy mal, muy mal: ni se planchan las sábanas ni las cortinas (entre nosotras: las camisetas de mi marido tampoco) ni se frota un baby. La profesora de la guarde de mi hijo pequeño el año pasado me pidió disculpas porque «fíjate, como se ha puesto hoy el baby». ¿Eeein?. Pues para eso está. Como salga de la lavadora así se lo pongo. Después de heredar los babys de sus 3 hermanos imagina como están los babys: se tienen solos.
Mi lema es: a todo no llego, hay que priorizar. Tardé un poco en darme cuenta pero ahora vivo menos estresada y soy más feliz.
Uy, tu comentario se había ido al spam! No le ha gustado eso de que no se plancha, jajajajaja…
Totalmente de acuerdo contigo!
🙂
Como siempre, genial, divertida y cruda como tú sola.
¡¡Besos, amiga!!
Muchas gracias, guapa!!! Que alegría hablar contigo!
Ja ja, es imposible culturizarse con:
– Master
– Madresfera / organizo eventos
– blog
– Criatura
Con leerte lo que te mandan en el master ya vas sobradísima, a pesar de esto si tienes hueco y no lo has leído te recomiendo Maldito Karma, muy ligerito y para reirse mucho.
Uhm de acuerdo con casi todo…. lo de salir en bata y en zapatillas no por favor, al menos… un poquito de glamour 🙂
Eres una curranta!
En mi calle es la última moda, que lo sepas 🙂
Gracias guapa!!
Sí que me lo he leído, cuando leía, claro, jejejeje, y me pareció entretenido. Ahora lo máximo a lo que aspiro a echarle un ojo a algún comic. Necesito un respiro 🙂
Hay un punto en los masters que parece que no van a acabar nunca pero ánimo que siempre se terminan, luego pasa como con los armarios, todo el tiempo que parece que vas a tener de repente desaparece porque ya lo has rellenado con otra cosa .
Querida,
Bienvenida al club de las Imperfectas que se relajan mientras la vida pasa… El montón de la plancha ha venido a buscarme mientras aprovechaba este solecito de invierno y le he dicho que nanai desde la hamaca de la terraza.
Por otra parte para que te relajes con lo del pijama te diré que es pura TENDENCIA:
http://www.secretariaevento.es/blog/tendencia-pijama-el-pijama-sale-a-la-calle/
Vas a ir IDEAL al cole de marginales a buscara tu hija…
Jajajajajaja, me parto con lo del pijama, pues claro que es tendencia! Y además son los pijamas de los de antes, de los que se dan de sí y quedan colganderos, jejeje…
Ideal, mari, ideal de la muerte, y súper integrada!!!
Ya te digo! y por cierto, cómo va la búsqueda de cole?, a mí me tiene loca, jejeje
Y si vas en chandal pues tipo uniforme y algo menos que pensar…yo cada mañana cuando voy al trabajo me encuentro a la misma señora en pijama y paseando a su perro, incluso esperando que abra el banco y tan tranquila…no hay como el pasar!
Pues ahí estamos, pero soy optimista 🙂
Eso sí, lo del pijama es una actitud, amiga, es toda una actitud!!!
Tu eres una máquina…y no se hable más.
Si te descuidas un día no serás la única en aparecer con bata de guatiné y rulos en ahorramás..
Animo, que estás increíble. Mejor o pero…eres una GRAN madre!
jajajaja, muchas gracias!! eso sí, los rulos no entran en el plan, aquí somos más de moño con pelota de calcetín, a lo Isasaweis, que hay clase! 🙂
Bueno, bueno… tu vas sobrada! Hablas de limpiar persianas o echar baldosinín… yo mejor limpiaba antes los cristales y los azulejos! Todavía puedes aflojar mucho, no te me estreses… 😛
Y lo del colegio público, seguro que no es tan malo, mujer. Los colegios humildes son muy buenos si el personal se lo toma como un reto ilusionante, y en la mayoría de las ocasiones suele ser así!
ehhhhhh, que yo no discrimino ni mucho menos a los coles públicos. De hecho es mi primera opción… Ahora bien, amigo, pásate un día por alguno que conozco y flipa…
En cuanto al baldosinín es herencia materna, veo el bote cada día y me recuerda cada día que mis azulejos no brillan como debieran… 🙂
Tienes toda mi admiración. Hacer un master teniendo hijos debería puntuar el doble. Yo sinceramente, no me he atrevido y llevo varios años tentada…
Sumando todos los demás elementos, entre ellos, estar embarazada me hace ponerme a tus pies. Eres todo un gran ejemplo de coraje. Sin duda alguna, querer es poder.
Ahora, lo de salir en bata y zapatillas no, que tú destilas clase y estilo por todas las letras.
Ah! y a la casa que le den!! 😉
Jejejejeje, pues sí, ya le dan pero bien a la casa, yo creo que iré al infierno de las marus por esto, si es que existe, pero sabes qué? que me da igual!!!! 🙂
En China lo de salir a la calle en pijama es el último grito… lo hacen las clases pudientes para dejar constancia de que viven en el barrio, y no necesitan arreglarse. Supongo que será en otro tipo de barrios en los que no hay Ahorramás, como en el mío. Que por cierto, desde que tenemos Lidl y Aldi, el Ahorramás ahora es el supermercado pijo del lugar… Ánimo mujer, que esto no es nada. Cuando tengas los dos churumbeles será peor 😛
Jajaja, muchas gracias, me animas mucho, que lo sepas!!!
Felicidades por ese pedazo de post. Te sigo!!
Muchísimas gracias!!! 🙂
Si para el próximo evento de la MADRESFERA al que esta vez seguro que asisto tengo que ir en chándal (o pijama) y pantuflas, me hagan el favor de avisar con tiempo, que una es muuu suya y eso de repetir modelito como que no mola y claro, solo tengo un chanda»le». A sus pies siempre, con o sin pantuflas.
Oiga, pues sería una idea genial, una fiesta de pijamas!!!!
Muchas gracias, guapa, con chandale y todo!!
Consuelate, amiga, que la climatología te está siendo favorable. La que suscribe dio a luz en septiembre y pasó su último mes metida en un barreño. Con los pies fuera, eso sí.
Propongo que te hagas con un pocho, o en su defecto, una falda hawaiana. A la que engordas, ni se notará. Hazme caso. Aguanta que ya queda poco.
Hala Madrid!
jajajaja, amiga, es tu comentario más surrealista hasta la fecha! Genial!!!!
🙂
Mi queridísima Accidental,
Noto el alboroto de sus hormonas; deje que se acerque la hora, le toque el momento «limpieza del nido» y esa cortina estará niquelada, se lo digo yo.
Puedo demostrar científicamente que el limón, el amoníaco rebajado, el KH7, Vanish, poner al sol, dejarlo en leche,…, NO FUNCIONA. Lo mejor, quitarse la tontería marujil o comprar varios babys… así he conseguido repartir el efecto de los lamparones por distribución periodificada y es muchísimo más barato que los tiempos y productos antes nombrados.
¿Continúo? Con lo de la bata, pijama y las zapatillas, mil perdones pero me cuesta entenderlo y no puedo compartir esa posibilidad, y mire que hago esfuerzos por la simpatía que le profeso. El tacón me ha ayudado a sentirme más alta, más rubia y más ojos azules y apretar el culo que el Kegel en todo su esplendor, combinado con medias maravillosísimas que me pervierten el alma y la de los demás. Puedo levitar y encantarme de conocer mi cuerpo de odalisca y sólo apto para caprichosos.
Yo plancho todo-todo-todo, incluida la ropa interior, siempre que la viscosa, poliéster, seda y demás fibras así lo permitan, por no hablar de tintes muy sensibles. Pero como lo tengo todo periodificado, 5 lavadoras, 1,5 secadoras, 2,30 horas de plancha a la semana, me dan una especie de bula para que no me deje llevar por los demonios. Mi minifamilia denomina esa zona «el infierno» lo cual me da una posición de poder a la hora de negociaciones varias durante el reparto de acciones (por ejemplo, dar de comer a las gallinas).
Tema colegio de los niños, decidan lo que decidan, pasará lo que tenga que pasar, con outsourcing o camisas Lacoste, con familias desestructuradas o nannys trilingües… Tengo un máster cum laude en esas líneas y el mundo está desajustadillo y siempre tiene uno que llevar el alicates a mano.
Dele abrazos reposados a la niña que está, rurullos al que viene y un sonoro caramelo de cariño para Vd, que disfrute del último trocito de su preñez con la cuestión Madresférica tan estupenda que gestiona.
Desde el norte, suya,
Muchas gracias, como siempre, por su consejo y asesoramiento en las cosas de la vida. Sin duda está Ud en mi Gente que Sabe Mucho sobre Todo, en general.
Le haré caso, estoy segura de que esa cortina caerá en cuanto acabe el módulo actual del máster que me tiene loca, pero eso será cuando tenga que ser, hombre, nada de prisas, jajajaja
Muchos besos y abrazos van para el norte (la carta ha vuelto a casa por un problema en el franqueo, jjjjj, somos lo peor, pero mañana vuelve a salir, a tozudos no nos gana nadie. jejejejeje
Wuuaaaaaa hacia tiempo que te quería leer, y son ciertos los rumores, la niña lo hace muy bien. Eso si yo que me estaba pensando darle compañia a mi monillo, despues de tu post me lo voy a pensar, aunque mis pijamas siempre han sido monísimos y seguro que nadie diría nada.
Mucho animo
jajaja, muchas gracias!!! Que no sea yo la que te desanime, mujer, que a tu monillo seguro que le encanta la compañía (eso sí, luego no se admiten reclamaciones y eso de «no me lo advertisteis, jajaja)
Gracias!!!
Es que priorizando se llega a Roma, amiga, pero tú llegarás mucho más lejos, aunque solo sea por lo avanzado del bombo 🙂 un mesecito namas???? ays!! qué poquito ya!!
besos!!
Gabacha, qué alegría que hayas recuperado tu conexión!! Te dábamos por pérdida en la campiña, jejejeje…
Oye, pues Roma no lo conozco aún, así que sí llegamos hasta allí no será mala cosa… eso sí, hasta dentro de unos cuantos meses que no sea, que me viene mal, jejejeje… aún me quedan un par para el pequeño, pero casi casi está aquí, jjj
Un besote!!!