Otra serie inglesa «imperdible» donde las haya.

Ideal para espíritus afines al drama original y a los acentos ingleses de barrio, con toques de ciencia ficción, sin alardes, eso sí, y con chispazos surrealistas y cómicos esparcidos por el tremendo guión y la interpretación ejemplar de sus protagonistas.

Como no quiero reventarla, que es de muy mal gusto, tan solo diré que va de cinco chavales que están cumpliendo una especie de servicio comunitario, no son angelitos, no. Y en éstas andan, cuando pasa algo que cambia el curso de sus existencias de forma dramática.

Lo mejor para mí son, por orden:

– El guión: impresionante, sencillo a pesar de sus situaciones rocambolescas, y muy bien traido y llevado.

– Los actores, y en especial, Robert Sheehan, o Nathan en la serie. Este chico puede llevar él solito toda la trama y te quedas tan pancho. Cómico hasta decir basta y sin embargo creíble en sus momentos más blandos.

– La música: aconsejo vivamente escuchar la playlist de la primera temporada aquí.

En definitiva, una serie redonda la mires por donde la mires. Eso si, hay que verla en V.O. No hay doblaje en español, al menos por ahora, y además, merece la pena solo por oir a Kelly con ese precioso acento ininteligible.

Y nada más. Que la segunda temporada ya ha empezado y hay que verla.

Y por cierto, ¡que viva Berlanga!