Puedo jugar a ser lo que yo quiera. Entrar, salir, hacer y deshacer. Puedo ser quien yo quiera, y no ser nadie si me apetece. Puedo dejar rastros en mi camino o pasar sin rozar el suelo. Puedo tocar en tu puerta al marcharme o salir sin que nadie lo note.
Y no tener muebles.
Y vivir a bocanadas.
Y ser una cama sin hacer.
Imagen: Cama sin hacer,1957 IMOGEN CUNNINGHAM