Inciso: hacer el monguer es básicamente lo que hago yo en los siguientes casos, no hay más que leer para entenderlo. Gracias por su comprensión.
A veces, hay que reconocer, que con esto de Internet hacemos cosas muy raras. Y yo la primera.
Por ejemplo, ahora acabo de recibir un email de un sitio en el que un día me apunté en el que si contestas encuestas te pagan dinero. Hasta ahí, bien, ¿no? Pues no. Porque todas las encuestas que me mandan, bueno no, para las que pagan 0,25 € o similares, y que duran media hora, sí que califico. Qué bien. Pero en las que pagan 2.00 € en cuanto me preguntan mi edad o si soy mujer o marciano, la jodí pero bien, y hala, ya me sueltan el educado «para esta encuesta, desafortunadamente ya tenemos el cupo de marcianos lleno. Gracias, maja».
¡¡¡Así no voy a conseguir la tarjeta del corte inglés ni en 20 años contestando encuestas, señores encuestadores!!! De hecho, mi santo que también se apuntó (somos muy de, ah, que tú te apuntas a eso? Pues yo también…) en cuanto se olió el pastel dijo que pasaba de intentarlo siquiera y ya ni abre las encuestas.
Pero aún lo de las encuestas tiene un pase (yo me digo a mí misma). Después, en el ranking de
grandes fiascos de internet personales están los foros (y en concreto, algunos de maternidad). Ahí como entres sin salvavidas o una soga bien atada a la cintura y alguien que tire desde el otro extremo, lo mismo estás perdida. Qué densidad, qué intensidad, qué mundo rosa de emoticonos sonrientes y ángeles y hadas brillantes y parpadeantes que anuncian que a no sé quién le quedan dos meses para llegar al mundo, y tal y cual… Ufff. Y bueno, que si a ti te gustan los excesos «purpurinésticos», adelante, que a mí el formato plin, pero claro, es que empiezas a leer y se te cae el alma a los pies. Que tú entras con la duda de si tu pequeña puede o no, o debe o no comer yogur antes de los nosecuántos meses, y diooooooooooooooooooooooooooooooos mío, lo que puedes encontrarte ahí es peor que un capítulo de American Horror Story (ohhh, escalofriante serie que recomiendo a los fans de Lynch, de Siete metros bajo tierra y de todo lo raruno). Empiezas a leer testimonios sobre casos de alergias casi asesinas, de que su angelito se había metido el yogur por la nariz con la tapa y todo, de cómo el yogur se había apoderado de todas sus pertenencias, les había robado la cartilla del banco y les había denunciado a la Agencia Tributaria por no haber pagado la casilla 54… Ay, madre, desde aquí, que una vez estuve allí y lo vi con mis ojos, os aviso, amigos, los foros están llenos de gente muy rara!!!! Acudid a vuestro médico, por dios, o leed libros, pero no os creáis todo lo que dicen por ahí (si fuese por algún que otro foro, Danone estaría en bancarrota hace tiempo, os lo digo yo…).
Ahora bien, lo peor, peor, PEOR que he hecho nunca en Internet (además del experimento ese de juntar tu foto y la del santo a ver cómo nos salía la criatura, que eso habría que prohibirlo por el susto que te pegan) ha sido dejarme llevar por la inconsciencia, la ignorancia y la estupidez a partes iguales y abrir uno de esos mensajes cuyo asunto reza: Enhorabuena campeona, has ganado un iPad 2!
Sí, lo reconozco, con la banda negra ante los ojos. Y mira que he trabajado en esto, que lo sé, que ya me lo han dicho, que es para darme con la vara y quedarse tan a gusto. Pues sí… Una vez, no hace mucho (no me vale la justificación de que fue hace mucho y no sabía de que iba el tinglado, mentira!) aún no entiendo por qué, pero lo abrí. Me dejé acariciar por la idea de que había sido afortunada y simplemente les di mis datos. Tonta, no, tontísisisisisima, que ya lo sé. Si aún no me lo explico…. Y me lo repetí así como ochenta veces mientras, en la media hora siguiente a haber contestado a aquel nefasto email bomba, mandaba a la carpeta de spam decenas de correos y me tenía que desinscribir de servicios tan geniales como saber el número de la lotería de esa semana, recibir las ofertas al segundo de todos los hoteles del mundo, todas las ofertas de los chinos especializados en carne de gatillo asiático y miles de absurdeces similares.
Eso te pasa por idiota, nena.
Lo sé, lo sé. Pero hay veces en los que hay un yoquésé, un quéséyo que se apodera de ti y la racionalidad se va a dar un paseo o a sacar al perro mientras en ti solo se queda la sustancia blandengue no pensante.
Pd. Aunque aún no está en el aire, os invito a pasaros por Madresfera y sus perfiles de Facebook y Twitter. Os aseguro, palabrita de monguer, que en breve despegamos y no os haremos perder mucho el tiempo. Gracias majos!
Pd2: Ah, por si alguien lo dudaba, el iPad 2, como era de esperar, ni está ni se le espera.